Recientemente me he encontrado trabajando en un modelo de epidemias en el que incluyo características como la distribución geográfica de la población. Aunque el modelo y los datos aún se encuentran en una fase muy temprana para hacer cualquier tipo de predicción, algunos de sus resultados tienen un valor de divulgación para hacer conciencia sobre la importancia del distanciamiento social para mitigar el número de casos del nuevo Coronavirus (COVID-19).
Debido a nuestra falta de intuición sobre el significado de un crecimiento exponencial en el número de casos, puede ser difícil apreciar la importancia de acciones como la auto-cuarentena. Es por ello que, con el propósito de generar mayor conciencia al respecto, me parece adecuado presentar algunas simulaciones visuales de como afecta la interacción de la población en el número de casos (infecciones) que se presentará a futuro.
En la presente simulación (reproducir el video), se genera una población inicial de individuos infectados (distribuidos aleatoriamente), los cuales tienen una probabilidad de infectar a los individuos con los que interactúan. A su vez, estos nuevos infectados podrán hacer lo mismo con el transcurso de los días, hasta que se recuperen y ya no representen una fuente de infección. La interacción de los individuos infectados con el resto de la población es a nivel local, pero ocasionalmente algunos se movilizan a otras zonas de la población.